Los sentidos amplificados

El sentido del humor, como su nombre indica, parece ser otro sentido más que se suma a los ya conocidos cinco, y a mi humilde parecer, no todo el mundo lo tiene muy desarrollado así como no todo el mundo tiene desarrollado el olfato, por ejemplo, y por eso usan perfume. Así de simple.

Soy una ferviente defensora de desarrollar el sentido del humor pues creo que éste nos puede salvar en estos y otros momentos de crisis. Vivo en un país en el que cada noticia genera un chiste y creo que nuestro humor negro es tan grande que a mayor drama más rápido el chiste y más certero. Un ejemplo, ya todos saben que el padre Marcial Maciel es mi conacional, pero lo que no creo que sepan es que en realidad era luterano, en fin, eso, que le gustaba a la par el útero y el ano… Así nos cocinamos en este país las noticias y sin duda creo que gracias a ese sentido ampliamente desarrollado podemos sobrevivir a tanta desgracia y a tanto desatino.

Como ven hay humores muy diferentes: bestias, soeces, negros, inteligentes, mordaces, sutiles, finos, elegantes… A mí en lo personal me gustan todos, todos, todos. Soy una facilota ¡qué le vamos a hacer!

Los invito desde aquí a concederle a este sentido al menos un momento al día, porque como leí hace poco, cualquier momento de disfrute real que hayamos experimentado en nuestra vida lleva consigo al menos una sonrisa.

Les confieso que el señor Pedro Bravo (que es el hacedor de este bolg) y yo compartimos la visión de que el mundo se podría dividir entre aquellos que amamos Borat y aquellos que la detestan. No quiero hacerle publicidad a la película, pero sí me encantaría vivir en un mundo donde todos tuviéramos incorporado un poco más este sentido (que será el sexto, el séptimo o el octavo, me es igual) a nuestra vida diaria y de esa manera supiéramos reírnos, si no de todo, de casi todo.

Jean-Jaques Sempé
Jean-Jaques Sempé

Pero esto es como una dieta, o como una rutina de ejercicio, hay que aplicarse y avocarse a ello. Les recomiendo para empezar, que consulten el New Yorker, que contiene excelentes artículos de humor y échenle un ojo al blog de Robert Mankoff que contiene uno y mil one liners de sabiduría con sonrisa integrada. Se puede convertir sin duda, en su pensamiento del día.
Tampoco se pierdan a Sempé, maestro de maestros del sentido del humor fino con un arte delicado, y ya como guinda del pastel, saboreen a Gary Larson. Para zambullirse de lleno en estos últimos dos autores y su arte superior lo mejor es adquirir sus libros, pero aquí arriba les he dejado una pequeña muestra.

Del blog de Bob Mankoff  les comparto uno de mis preferidos de la semana pasada… para que nos riamos un poco de nosotros mismos, que por ahí se empieza. Como dice el dicho: “Si te gusta el durazno (melocotón) aguántate la pelusa”.

Alex Gregory para el New Yorker
Alex Gregory para el New Yorker

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